martes, 15 de abril de 2008

Te echo de menos...

Te echo de menos...Demasiado...porque me gusta pasear por tus calles, me gusta tu gente, adoro pasear por el Albaicín entre sus callecitas y perderme en ellas. Sentarme en el Mirador de San Nicolás y ver como se asoma frente a mis ojos tan bonita, tan evocadora, tan llena de leyendas y de verdades la bella Alhambra de mi Granada del alma. En mis recuerdos siempre estás presente por multitud de circunstancias, porque en ti he pasado los mejores momentos y otros, la verdad no tan buenos, pero que me han hecho madurar y ser una mujer.


Recuerdo como me sentaba a leer en el Parque de Garcia Lorca, junto a la casa del poeta, unos versos de Federico mientras veía pasar la gente y allí en el caminito había una mujer escondida tras su lienzo plasmando el jardín rebosante de rosas blancas.

Luego iba a pasear por las calles de Bibrrambla y me perdía por la Alcaicería entre sus pequeños puestos y... !!cómo olía a especias!!, que olor tan especial...Me encanta ir a las teterías para degustar esos exóticos sabores y mantener un buen rato de conversación en buena compañía...

Cada rincón de mi Granada esconde un tesoro por descubrir, y merece la pena dejarse llevar y descubrirlos...Hoy en día por multitud de motivos vivo lejos de mi Granada pero siempre la llevo conmigo allá dónde voy y siempre que puedo vuelvo a mi tierra y recorro estos lugares que me evocan tiempos pasados...

3 comentarios:

Qalamana dijo...

Ahora soy yo la intrusa :)

Preciosas palabras, y Lorca... qué decir de él!!!

Anónimo dijo...

Hola de nuevo. Siempre lo he dicho. Granada es una ciudad maravillosa y mágica, que me trae muy buenos recuerdos. Vivo en Málaga, pero mi hermana vive allí y la visito (a la ciudad y a ella) a menudo, aunque tengo una cuenta pendiente con la Alhambra y las tapitas de "la Chana".

Muchas gracias por tus felicitaciones en mis "visitas". Personas como tú sois las que me animáis a compartir "hechizos".

Saludos,

Mario Fizzio dijo...

sería imposible no echar de menos Granada, esa ciudad se queda un pedacito de mi alma cada vez que la visito... y el resto... es añorarla.